Columna exclusiva para la web del miércoles 25/01/2012
Cabe otra precisión sobre la nota de La Nación del último sábado con el título: «Discrepan en Uruguay sobre el número de turistas argentinos. Operadores cuestionan las cifras oficiales que indican un aumento del 26 por ciento».
En la nota, el Pepe con su gente, podría haber mentido sobre el real numero de turistas argentinos con el propósito, seguramente, de darle una mano al gobierno de acá.
Se dijo con insistencia que la temporada fracasaría por el tema del dólar. Y ahora, con la salida del Pepe diciendo todo lo contrario, parece sospechosa.
Quizás el gobierno uruguayo no esté falseando los datos(¿para qué?, ¿cuánto le costaría traicionarse en eso?), sino que la gente se distribuye de otra manera y quince van para un lado y quince van para Punta (pero suman 30, claro).
Pero habría una razón que el diario pone en boca de un grupo más avispado de operadores: «Según diversas fuentes uruguayas, en los primeros días del año, como durante diciembre,muchos argentinos habrían cruzado a Uruguay exclusivamente para adquirir dólares ante las dificultades para poder hacerlo en su propio país».
Este doloros final de la nota, escrita en el exilio, puedo corroborarlo.
En uno de mis viajes tuve a mi lado a un avivado de los que se las saben todas para comprar dólares.
En Uruguay no saben nada y comen vidrio como deporte nacional.
El tipo pensaría en eso, pero dos, de tantas cuentas no me cerraban.
El pasaje en avión, el taxi, lo que comía, el tiempo invertido, lo compensaban.
¿Cuántos dólares que tenía que comprar para que valiese la pena?
Miles y miles haciendo eso, al margen de hacerle creer al Pepe que iban por su linda cara, no despertarían sospechas?
En serio, no sean malos.
Víctor Hugo