Vamos a Volver Web

Gracias al colega Juan Kirchner y a sus compañeros del sitio web «Vamos a Volver» por la entrevista que me realizaron en llos estudios de AM 750.


“SOMOS PARTE DE UNA LUCHA DESVENTAJOSA, PERO MUY DIGNA Y HAY QUE MANTENERLA”

Marcó a una generación de comunicadores. Quizás más. Comprometido con la verdad, siempre dijo desde dónde habla. Futbolero como muchos pero periodista como pocos. El primer rioplatense en enfrentarse al Grupo Clarín a través del éter y desde los estudios de Canal 7. Nunca abandonó esa lucha y fue uno de los referentes principales a la hora de pelear por Ley de Medios aprobada durante el kirchnerismo (hoy borrada de un plumazo). Sinónimo de libertad de expresión. Tal es así que los primeros días de Enero se llenó la Plaza de Mayo para escucharlo, verlo, acompañarlo (y acompañarse) cuando lo dejaron sin aire. Con su mirada intacta y su voz que todo lo abarca, Victor Hugo Morales confió en VaV porque hay que estar, salir y hacer: “todo lo que se logra, por poquito que sea, siempre vale”

Por Juan Esteban Kirchner y Leonardo Anolles / Fotos: Nicolás Foong

(7:30)

Aún no era de día cuando muy amablemente saludó a sus compañeros de equipo de la AM 750. Buenos días y a trabajar. Café, información y reunión de producción. Entrada en calor.

(08:55)

Minutos antes del aire, rodeado de productores, periodistas y técnicos, se oxigena. Mira por la ventana. Piensa. Un conductor de radio es justamente eso: conductor. Y para conducir un equipo no solo hay que tener experiencia, también hay que pensar y confiar en el otro. Pero sobre todo pensar para saber cómo actuar en cualquier escenario. Tiene la banda de capitán. Debe hablar cuando sea necesario. Con el árbitro o su audiencia. En radio no puede haber silencios injustificados. Es el responsable del programa y los minutos iniciales son fundamentales para todos: los que juegan y los que oyen. Quizás por eso sigue pensando. Solo. Mientras tanto, alrededor suyo, un universo de noticias no para de circular.
Su mirada sigue fija en la ventana que, ahora sí, regala color a todo lo que nos rodea.

(08:59)

Se incorpora y nos abraza con su mirada. Empieza el partido.
– Quédense… verán como arrancamos el programa de hoy con el mamarracho de la denuncia de Stolbizer.

– ¿Los minutos previos al aire serán como los del vestuario antes de salir a la cancha?
(sonríe, mira a su interlocutor) – Sí… creo que sí… hay algo de eso.
No pierde la sonrisa… “Acá está todo bien, este es un lugar grato de laburo”

La nota se realizó antes del inicio del programa mate y facturas mediante. Con las disculpas del caso por no comer harinas, ofrece y comparte con sus compañeros de equipo.

(08:15)

– ¿Hay algún momento en el que decidió dedicarse con más ímpetu al periodismo político? Está claro que pudo haber optado sólo por el periodismo deportivo, como relator o comentaristas, pero el último tiempo ha tomado un rol preponderante en el campo de la política.

– Desde el primer momento de mi vida que soy un periodista integral al que la condición de relator deportivo le devoró otros aspectos de lo que hice toda la vida. Empecé como locutor y como informativista. Lo primero que hice fueron programas, no periodísticos, pero sí entrevistas para el informativo de Radio Colonia. Tenía 16, 17 años. A los 18 empecé a relatar y eso empezó a devorarse otras cosas, pero después trabajé como movilero de un programa de Radio Monte Carlo de Montevideo y en el informativo de Radio Ariel.

En el caso de la Televisión, los programas que tuve casi siempre fueron de otro tipo. Aquí en Argentina hice un programa humorista que se llamó El Espejo, en 1984. En 1991 tuve un programa de radio como el que tengo ahora que terminó por remar contra el neoliberalismo. Eso fue en los tiempos incipientes de Menem. En 1997 publiqué un libro llamado Un Grito en el Desierto que es profundamente político al tiempo que un ensayo contra el neoliberalismo. En el 2000 tuve la conducción de un programa noticiero donde siempre cabe lo político. En el 2007 empecé con este programa que ahora está en el aire en AM 750…

– Pero hay una clara diferencia con otros periodistas: Usted ha estado en señales comerciales y sin embargo dice desde dónde habla sin ocultarse detrás de una supuesta “objetividad”.

– Cuando hablaba de fútbol contra Clarín, desde 1990, era político el tema. En el fondo todo es político. Pero la lucha que llevaba contra Clarín era hablar desde donde estaba parado en mi vida.

Creo que hay algo que posiblemente la gente valora, tanto lo que te estiman como quienes no te estiman, y es que se entiende desde donde hablo. Hay un lugar desde lo humano, desde lo político, desde lo social y de pertenencia. Desde ahí hablo.
La objetividad es que un tipo le pegó 6 puñaladas a otro pero la compresión que vos tenés de aquel acto te corre al plano subjetivo. Por lo cual la objetividad como tal no existe en el tratamiento de los temas, mucho menos en la política. Todos estamos inmersos en una forma de ver el mundo y hablamos y criticamos y juzgamos desde ese lugar.

– Pero usted no elije hablar de las seis puñaladas, elije hablar de las consecuencias del neoliberalismo, por ejemplo, como recién comentaba de su libro Un Grito en el Desierto.

– Los periodistas se cuidan bastante. Hay una necesidad de permanencia que hace que todo se maneje dentro de los intereses de las empresas periodísticas (que son enormes) y las libertades, claramente, son condicionadas. Y no hay excepciones. Salvo para aquellos que consiguen un perfil propio que por algún motivo el medio respeta mientras no tenga más remedio: o porque sos un buen negocio o porque tienes buena audiencia. Se la bancan al acecho de que en algún momento te la dan, como es de rigor.

Todas las empresas periodísticas quieren manejar en sus medios de comunicación su línea editorial. Todo periodista, los pocos que lo hacen, que se escapan de la línea editorial y tienen la suya propia en algún momento van a ser inconvenientes.
¿Por qué yo tengo esta cierta independencia? Porque siempre fui un buen negocio para los medios. Toleraban cosas mías, excesos míos. La pelea con Clarín por ejemplo a la radio -Continental- le molestaba tanto que terminó echándome en el 2002. Torneos y Competencias tenía un 20 % de Telefónica y Telefónica era la dueña de la radio. Allí ya empezaba a debilitarse el gran negocio que había sido por el fútbol y me echaron. Luego me volvieron a tomar gracias al público.

– Hay un hecho clave que repitieron hasta el hartazgo por todos los medios: el allanamiento, justamente, del Grupo Clarín a su casa… a su intimidad. Pasado el tiempo ¿Cómo lo recuerda?

– Yo estaba muy angustiado por el hecho familiar. Mi mujer la estaba pasando muy mal, mi hija estaba muy perpleja, mi tía muy asustada y yo muy caliente. Es decir: estados de ánimos alterados. Fue una acción muy perversa, innecesaria, propia de quienes quieren tirarte encima mucho poder. Lo recuerdo siempre como un episodio muy desagradable.

– Unos meses más adelante, ya con Mauricio Macri como Presidente, no pudo entrar más a su propio programa en Radio Continental pero sí pudo ir a una plaza que no tardó en reaccionar ante tanta injusticia.

– Lo de la radio fue un poco humillantes, medio tristón como final. Fue como señal de ajuste de la radio, mucha impotencia. Y lo de la plaza muy reivindicatorio, muy a buenas con la vida. Me paraliza pensar en ese momento, fue extraordinario.

DE LA LIBERTAD DE EXPRESIÓN A LIBERTAD PARA DOMINAR

A Víctor Hugo le cerraron la puerta de Radio Continental pero la Plaza de Mayo se abrió en miles de abrazos para recibirlo en el lugar con más historia (s) de Argentina. Frente al Cabildo, a metros de la Pirámide de Mayo y a años luz de la Casa Rosada ocupada por Cambiemos.

(08:25)

– Este gobierno es una desgracia para la sociedad más vulnerable. Por donde se lo mire. No hay aspecto político, económico, sociológico, periodístico, de libertades o de justicia que no sea una carga muy pesada para el espíritu y la compresión de los hechos políticos de una buena parte de la gente. Por lo menos para los sectores más vulnerables y estamos hablando de, quizás, 2/3 de la población. Si tomamos los 3/5 de la población, un quinto se traicionó llevado de las narices por los medios de comunicación traicionándose así misma cuando votaron en noviembre.

No hay aspecto del gobierno actual que yo pueda recuperar. Nada, nada, nada. Para los medios de comunicación y la libertad de expresión cabe lo mismo, no hay nada que pueda recuperar. Son terribles las cosas que están haciendo Practican el choreo a la vista; el cinismo en todos los aspectos de la vida; el poder que apabulla; la domesticación de la justicia. Podría agarrar cien cosas que ha hecho este Gobierno y no hay una que sea positiva. Ni hablemos de la Ley de Medios. Lo que han hecho con la Ley de Medios es la demostración más evidente que la libertad de expresión, las libertades en general y la propia democracia, con esta gente no tiene salida. Está profundamente afectada la democracia. No hay democracia si no hay libertad de expresión. Y no hay libertad de expresión si no hay distintos medios que puedan ejecutar la libertad de expresión. Para que ello ocurra tienen que estar los medios.

Si no están los medios la libertad de expresión es solo para unos pocos que normalmente son los sectores dominantes, por lo cual no estamos hablando de libertad de expresión sino de libertad para dominar.

GATOPARDISMO Y PODER REAL

(08:30)

– ¿Cómo enfrentamos, entonces, semejante poder?

– Haciendo esto que estamos haciendo aquí. Siendo consciente, cada uno, de que integra una célula, quizás limitada, pequeña, pero que es útil, necesaria. Mantener la pelea, la lucha la lucidez. Mantener la información. Lo otro sería abandonar porque estamos derrotados de antemano.

Creo que hay mucha dignidad en lo que hacemos, por eso sigo al aire, por eso estoy aquí porque sé que también ustedes están peleando. Somos parte de una lucha desventajosa pero muy digna y hay que mantenerla.

– ¿Se hubiese podido ir más a fondo durante el gobierno kirchnerista, al menos, en la Ley de Medios?

– Lo que pasa es que sin ir tan a fondo no había manera de aplicarla… la muestra está. Lo establecido siempre tiene un poder feroz. Ese es un verdadero drama. Vos querés, en política y economía, aplicar medidas más justas y te encontrás con que las leyes son neoliberales. Vos querés progresismo pero lo tenés que hacer con leyes neoliberales y si querés voltear una ley del neoliberalismo tenés una lucha de brazo partido con todo el sistema de medios de comunicación que ellos manejan. Termina resultando casi imposible. Entonces: todo lo que se logra, por poquito que sea, siempre vale. Por supuesto que nunca puedes ir a fondo con ningún tema. No hubo forma de penetrar el entramado de poder neoliberal que domina siempre al país.

El país siempre fue capitalista y dentro del capitalismo el neoliberalismo tiene siempre las herramientas más importantes y más fuertes. Aún el gobierno actual está lejos de ese inmenso poder. En algún momento hubo cierto poder político que pareció que lo podía confrontar, pero a la larga no pudo porque el desgaste del poder político es enorme y el desgaste de los otros es prácticamente invisible

– ¿Estamos en el límite de lo que plantea la democracia liberal?

– Exacto… la construcción es muy difícil, es muy desventajosa. Avizorar que la Argentina podría salirse de un mundo tan injusto y perverso como el que tenemos sería una utopía. Ahora bien, dentro de esa utopía no podés dejar de pelear por las cosas que querés, porque dentro de esa pelea pasan cosas linda y hay algunas etapas de la historia que se acomodan un poco más a nuestros sentimientos. Lo que pasó durante estos últimos 12 años no es moco de pavo. Van a volver esos tiempos porque esta gente va a ser tanto desastre que un día no va a haber otro más remedio traer a los que tengan que incluir a la gente que está quedando afuera. La gente está muriendo de frío, se van a empezar a morir de hambre y probablemente aumente la mortalidad infantil…

– ¿Ahí está el límite del relato macrista?

– Sí. Absolutamente.

– ¿Pero será tan sencillo pensar la vuelta? La impresión es que este gobierno está despolitizando a la sociedad, quieren llevar a gran parte de la población a descreer de la política y llegar al “que se vayan todos”.

– Absolutamente… y los que más colaboran son los políticos. Por debilidad, complicidad o estupidez. Es impresionante la colaboración de los políticos pensando que a ellos no les va a pasar lo mismo. Cualquier cosa que enfrente al poder real lo destruyen o lo ignoran. El día que Macri no les sirva lo van a cambiar por Urtubey o Massa. No hay ningún problema. Es una forma de tener un recambio para tener el famoso gatopardismo de cambiar para que nada cambie. Ellos ya cambiaron al país: lo cambiaron de progresismo a neoliberalismo, de izquierda a derecha, de inclusión a exclusión sin ningún tipo de problemas.

– ¿Subestimamos al enemigo?

– No… al contrario. El enemigo es poderosísimo. Ellos subestimaron a la izquierda, ahora no la subestiman más. Ellos sí subestimaron: siempre la izquierda les pareció simpática, buenos tipos, buena gente. Eso cuando no fue gobierno, cuando fue gobierno pasaron a ser lo peor: populista, ladrones, corruptos y lo que cabe.

DE ZURDA

Uruguayo y Argentino… un sudamericano que no tuvo reparos en apoyar a Evo, Correa, Dilma, Lula, Lugo, Chávez y Cristina ante cada embiste neoliberal. Comprometido con los procesos democráticos de la región se expresa con mucha vehemencia sobre la realidad venezolana, la cual conoce desde hace muchos años.
(08:45)

– Venezuela es una víctima de una guerra política y económica todavía mucho más feroz que la de aquí. Venezuela tiene un caballo de Troya constante y permanente que no lo tiene la Argentina: la embajada de Estados Unidos. Aquí la embajada norteamericana no se animó, en estos años, a tanto como a lo que se animó en Venezuela. Fue partícipe del golpe de estado del 2002 y ahora es partícipe, seguramente, de todos los males que se viven en cada venezolano. Allí la guerra económica trata de llevar a la gente a tanta desgracia que los propios adherentes del chavismo no puedan resistir. Llega un momento en que la gente no puede más.

– ¿Acuerda conmigo en que el golpe de estado a Fernando Lugo en Paraguay fue el tubo de ensayo a lo que está ocurriendo en el continente?

– Si claro: conmoción popular con el caso curuguaty y a partir de esa conmoción popular utilizar los elementos parlamentarias y judicial que le permitan actuar. Zelaya en Honduras y Lugo en Paraguay fueron los tubos de ensayo. En Honduras con el Poder Judicial con la Corte Suprema, y en Paraguay el Parlamento.

– Sin irnos de la región: ¿Qué reflexión le merece la decisión del Gobierno actual de acercarnos a los Tratados de Libre Comercio con Estados Unidos a través del ingreso a la Alianza del Pacífico?

– Es parte del todo macrista y neoliberal que nos vayamos hacia el Pacífico. Cualquier cosa con total de estar al calor de los Estados Unidos. Y ahí el problema, desde ya, son los Tratados de Libre Comercio. Frente a esto lo mejor es tratar de mantener la soberanía y dignidad con la integración regional. Y no hay nada más potente que la que se da entre Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay.

Se ha avanzado muchísimo en este concepto de integración regional. En lo conceptual en lo ideológico y en lo económico se avanzó todo lo que se pudo. El MERCOSUR es un tema complicado, es una gran asimetría. Hay un país de 200 millones, otro de 40, uno de 6 y otro de 3. Entonces es muy difícil pero es una necesidad.

¡ÁNIMO CHE!

(08:50)

– Por el tipo de información que damos ¿No caemos, quizás, en un desánimo a la sociedad?

– El ánimo sale del desánimo. El desánimo es lucidez. Lucidez es conocimiento del tema. Si vos conoces del tema te desanimas ¿Cómo no te vas a desanimar con todo lo que hace este gobierno? ¿Quien puede no desanimarse si cada análisis que hacemos es un horror? Pero de ahí sale el ánimo para cambiarlo.

– ¿Y cómo hacemos para llegar al que no es permeable a nuestro discurso?

– Depende de que se vuelva un desconforme más y busque guaridas donde rascar su fastidio. Pero mientras esté en el otro lado va a escuchar a los del otro lado. No hay puentes posibles ahí. Porque además están tomados afectivamente, desde el odio, desde la bronca. ¡Si les han dicho cualquier cosa!
Hablando desde los periodistas, nosotros debemos estar muy sólidos. Bien desde el argumento; fortalecidos desde la lucidez y conocimiento de lo que ocurre y transmitiéndole eso a la gente. Y buscar también con ingenio. Apuntar a que la gente sepa de qué se tratan algunas cosas. Eso es lo que podemos hacer y después esperar. Y yo, personalmente, en algún momento haré lo que dice Jhon Berger a través de uno de sus personajes: ‘el paraíso es mandar todo a la mierda’.

– Pero usted no eligió eso…

– No, es cierto… pero en algún momento puede ser tranquilamente una decisión… -su sonrisa cómplice aclara-

– Si tuviera que elegir una política durante el kirchnerismo con la cual se haya sentido más representado ¿Cuál sería?

– Creo que la jubilación para todos. Me cuesta ponerla por encima de la Asignación Universal pero la AUH es más lógica que ocurra. En cambio la jubilación me parece un dato muy fuerte porque no solamente es reparadora hacia adelante sino que es reparadora hacia atrás con las moratorias jubilatorias. Eso, sumado a como decayó a límites extraordinarios la mortalidad infantil son los logros más importantes.

Tengo una lista de 50 o 60 logros del kirchnerismo. Son increíbles. Cada una de ellas te hace preguntar ‘¿Esto paso?’. Cuando ves todo lo que se hizo estos doce años dices ‘no se puede creer lo que hicieron’. Cuando ves la película no lo puedes creer.
Quizás con algunas fotos no estuve del todo de acuerdo, por ejemplo: la ley antiterrorista, la ley de las ART, pagarle a Monsanto, pagarle al CIADI o con la 125 (que posiblemente fuese un error de mi parte). Pero si tomas la película entera es impresionante lo que se hizo.

– Milagro sala

Una presa política de la que no deberíamos olvidarnos. Esta aflojando la pelea por Milagro en algunos sectores, pasanda tantas cosas que te vas olvidando… Es la primer presa política hasta que la pongan presa a Cristina. Creo que se quieren dar ese gusto… les está saliendo mal las cosas, el caso de dólar futuro es un mamarracho. Y la denuncia de Stolbizer es un mamarracho también.

AIRE

Los primeros días de Diciembre del 2015, antes de la asunción del nuevo Gobierno, Víctor Hugo Morales mantuvo una extensa entrevista con quien asumiría, en pocos días, como Titular del Sistema Federal de Medios y Contenidos Públicos, Hernán Lombardi. En los estudios de Telesur, hablaron de todo pero jamás, Victor Hugo, imaginó la persecución a periodistas que llevaría adelante el actual funcionario de Cambiemos. La indignación del conductor de radio más conocido en el país, y quizás del continente, se hizo evidente durante el programa del día de la entrevista.

(9:00)

Piso, VH: “El canalla del año: Hernán Lombardi. Escuchémoslo.”

Audio, Hernán Lombardi: “Yo me indigno mucho porque tenemos que defender el dinero de todos. Los sueldos eran escandalosamente altos y además de eso están reclamando indemnizaciones. Es inmoral, ilegitimo e ilegal. Hay un intento claro de saquear al Estado por parte de algunos periodistas que trabajaban en medios públicos”

Piso, VH: “Como es un canalla, volverá al ataque. Quizás no personalmente. O a lo mejor sí, lo cual me honraría. Lo hace en realidad a través de los perros periodísticos que usan desde determinados medios de comunicación, en espacios que él les da, que él les concede para dañar a aquellos que han tenido siempre enfrente, sobre los cuales ha mentido sobre los sueldos que ganaba, a los que ha dejado sin trabajo hipócritamente y ha perseguido y hostigado.

Las ganas de decir que es un canalla no son contenibles cuando ha hecho tanto pero tanto daño. Cuando sea ha llevado por delante la libertad de expresión; cuando ha dejado sin trabajo a periodistas; cuando se ha comportado como un cínico, un hipócrita, que además trata de revertir el concepto para convertirlo en otro completamente distinto.

Participa de una estafa. Creador de una estafa junto a Fernando Marin, Mauricio Macri y a los canales de televisión que son cómplices. Ha hecho una estafa del Fútbol Para Todos como nunca se ha visto. Así como robó el Pro, choreo a la vista se llama lo que hace el Gobierno del Pro: robo a la vista. Roban Fútbol Para Todos. Paga el Estado pero la publicidad la van a usufructuar los privados, ellos son los que hacen el negocio. Eso es lo que hace Lombardi, ya no tanto como canalla sino en tanto funcionario público que no cumple con los deberes de un funcionario público.

Cosa misteriosa que no se lo denuncie. Posiblemente porque algunos están en la lona, o tratando de subirse a la lona, y otros son directamente cómplices, aunque se llamen opositores. De otra forma no podría prosperar ni minutos la estafa colosal que encabeza Hernán Lombardi contra ese Estado al que pretende defender. Provoca una enorme repugnancia que un hombre se comporte de esta manera, va… hombre en el sentido de género. Hay que tener una serie de condiciones, aún discutibles, expuestas a las discrepancias, para ser llamado hombre.

Canalla digo de lombardi porque me asiste el derecho de decir que es un canalla una persona que fue a buscar como primera instancia todo lo que yo ganaba en Radio Nacional y se encontró con que trabajé 17 años gratis ahí (tanto en AM como en FM). Después fue a Deportv a ver cuánto ganaba y se encontró con que había cientos de miles de pesos que yo cedía, que donaba, pero de todas maneras le dio la información a otro canalla periodístico, como él, para que dijeran que yo tenía testaferros: unos pibes de 20 años que cobraban el sueldo por mí. Canalla por donde se le mire.

Me hago plenamente responsable de lo que estoy diciendo, ni siquiera la emisora lo es. Me hago cargo de cada detalle, de cada palabra, de lo que digo desde la más profunda indignación. Pero no solamente la mía, a título personal, sino la que provoca, por el daño inmenso que este finamente acomodaticio personaje, le está haciendo a esta profesión que amamos.”

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